Vigilancia de los volcanes de Costa Rica por medios de la actividad sísmica

Una de las herramientas más eficaces utilizadas en la predicción de erupciones volcánicas es el estudio de la sismicidad asociada a los volcanes (Scarpa y Tilling, 1996, White y McCausland, 2016). De hecho, las primeras observaciones de sismos volcánicos establecieron claramente la relación causal entre el incremento en la sismicidad y las erupciones (Omori, 1911-1913). No es de extrañar que grandes erupciones acaecidas en los últimos 50 años haya sido anticipadas por medio del estudio de los patrones sísmicos (ejemplos: Monte Santa Helena, 1982; Monte Pinatubo, 1991; Volcán Merapi, 2006-2010). Dentro de la misión del OVSICORI se contempla la vigilancia volcánica. Desde sus inicios, se ha mantenido al menos una estación sísmica en los 5 volcanes activos del país: V. Rincón de la Vieja, V. Arenal, V. Poás, V. Irazú y V. Turrialba, incrementando el número de estaciones dependiendo del grado de actividad. Esta práctica ha generado una importante base de datos, que permite entender el comportamiento de estos volcanes activos y seguir el pulso de su actividad.  Con este proyecto se da continuidad a la actividad de vigilancia volcánica a través de estudios de sismicidad y se mantienen vivas las bases de datos sísmicos de los volcanes activos. Este proyecto solo contempla la revisión de las señales sísmicas de los volcanes activos, el almacenamiento de las señales que se estén recibiendo en el centro de datos, el procesamiento de los datos y la creación de las bases de datos con conteo de número de sismos volcánicos registrados diariamente, categorizados según su tipo e información hipocentral de los eventos volcano-tectónicos que puedan ser localizados con los datos disponibles.

OBJETIVO GENERAL: Dar continuidad a la vigilancia volcánica a través de redes sísmicas para crear mecanismos de prevención contra las amenazas volcánicas.

CÓDIGO: 0208-16

RESPONSABLE:  JAVIER PACHECO ALVARADO

PARTICIPANTES: JORGE ARTURO BRENES MARÍN.